20 de Noviembre de 2024
 
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Necesario garantizar paz y seguridad en la nación

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Amayrani Enríquez Cisneros | Orizaba, Ver. | 04 Nov 2024 - 13:41hrs

Ante la crisis de seguridad que se vive en el país, el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez aseguró que los distintos niveles de gobierno tendrían que revisar las estrategias junto con las instituciones encargadas de garantizar la seguridad y la paz de nuestra nación.

Y es que, la violencia impera cada vez más, pues tan sólo en Culiacán, Sinaloa, los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y grupos armados, tras el arresto de Ismael “El Mayo” Zambada, han dejado al menos 50 muertos y 70 secuestros, cifras que aumentan día a día, así como el aumento de tiroteos y secuestros que han sumido a la ciudad en un ambiente de guerra civil.

Otro ejemplo de ello, es la critica situación que se vive en Chiapas, donde, de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp) revelan que, hasta agosto de 2024, se ha registrado un incremento del 60 por ciento en las muertes violentas en comparación con 2023. En los primeros ocho meses de este año, ocurrieron 476 asesinatos, y hasta septiembre, el total asciende a más de 540 víctimas.

Ante esto, el portavoz eclesiástico señaló que los ciudadanos viven día a día en un panorama desolador donde la violencia no sólo genera pérdidas económicas y paraliza la actividad comercial e industrial, sino que también ha cobrado vidas.

Recordó que México ha vivido una serie de estrategias para combatir la violencia y el narcotráfico, muchas de las cuales han mostrado resultados desiguales.

Si bien, reconoció que el nuevo gobierno tiene poco tiempo en funciones, considera crucial que se mantengan las estrategias eficaces y se ajusten o cambien aquellas que no funcionan.

“Los obispos han dicho que las estrategias que funcionan se deben de mantener, pero también es necesario revisar y modificar las que no han sido efectivas”.

Por ello, reiteró que es importante construir un entorno seguro para las familias, donde las actividades esenciales para el bienestar común se desarrollen sin temor.

“Es imprescindible que podamos realizar nuestras actividades con paz y seguridad”.